Oraciones que contemplan las necesidades de nuestro prójimo
La contemplación de las necesidades del prójimo se centra en el bienestar general de la iglesia y del Estado, y considera como necesidad propia la que padecen los demás. Esta postura surge de un amor genuino y sincero, que nos une a todos como un cuerpo espiritual cuya cabeza es Cristo. Y este amor nos insta también a tener en cuenta el bien de la iglesia toda y del conjunto de sus miembros. Un miembro que por su parte no contribuye a la mejor conservación posible del cuerpo entero, o que no está dispuesto a compartir el sufrimiento de los demás, no puede llamarse un miembro legítimo. Lo mismo vale para el cuerpo espiritual de Cristo.
Por lo tanto: el que es un miembro auténtico y viviente de la iglesia de Cristo, no habrá de olvidarse de orar diariamente por la preservación de la palabra, por los pastores y los feligreses, por los gobernantes y los gobernados, y por las familias. Pues éstos son los tres principales estados instituidos por Dios para la sustentación de la vida en esta tierra y la expansión del reino de los cielos. En estas oraciones se habrán de incluir asimismo las que hacemos a favor de los parientes y benefactores a quienes nos sentimos unidos por algún lazo en especial; y no por último: por los enemigos y perseguidores, deseando que Dios los convierta. Así mismo por los que padecen necesidad y los que viven en la miseria, cuya triste suerte no nos debe dejar indiferentes.