IX. Sobre el Descenso de Cristo al Infierno

IX. Sobre el Descenso de Cristo al Infierno.

1] Y como también se encuentran explicaciones desiguales de este artículo sobre el descenso de Cristo al infierno entre los antiguos maestros de la iglesia cristiana, así como entre algunos de los nuestros, dejemos que permanezca en la sencillez de nuestra fe cristiana, como nos enseñó el Dr. Lutero en el sermón en el castillo de Torgau en el año 1533, etc., sobre el descenso de Cristo al infierno, donde confesamos: "Creo en el Señor Cristo, el Hijo de Dios, muerto, sepultado y descendido al infierno." En el cual, entonces, como diferentes artículos, el entierro y el descenso al infierno de Cristo se distinguen.

2] Y creemos sencillamente que toda la persona, Dios y hombre, después del entierro descendió al infierno, venció al diablo, destruyó el poder del infierno y despojó al diablo de todo su poder.

3] Cómo sucedió esto, no debemos preocuparnos con pensamientos elevados y agudos; porque este artículo, al igual que el anterior (cómo Cristo está sentado a la diestra del poder y majestad omnipotente de Dios), no puede ser comprendido por la razón y los cinco sentidos, sino que debe ser solo creído y sostenido por la palabra. Así mantenemos la esencia, y que ni el infierno ni el diablo pueden capturar ni dañar a nosotros ni a todos los que creen en Cristo.

Predicación de Lutero sobre el Descenso de Cristo al Infierno:

"Lutero dijo, 'Puesto que hemos enterrado al Señor Cristo y hemos escuchado cómo dejó esta vida, debemos también levantarlo y celebrar el día de Pascua, en el cual entró en una nueva vida, donde ya no puede morir, y se convirtió en Señor sobre la muerte y toda la creación en el cielo y en la tierra. Esto también lo testifica este artículo, cuando decimos: "Descendió al infierno, al tercer día resucitó de los muertos." Porque antes de resucitar y ascender al cielo, y mientras todavía estaba en la tumba, también descendió al infierno, para que también nos librara a nosotros, que deberíamos estar allí capturados; como también descendió a la muerte y fue puesto en la tumba para sacar de allí a los suyos. No quiero tratar este artículo de manera elevada y aguda, cómo sucedió, o qué significa descender al infierno, sino mantenerme en el entendimiento más simple, como suenan estas palabras, como debemos enseñarlas a los niños y a los sencillos.

Ha habido muchos que han querido entender esto con la razón y los cinco sentidos, pero no han logrado nada ni obtenido nada, sino que solo se han alejado más de la fe y han sido llevados lejos. Por lo tanto, lo más seguro es, para quien quiera proceder correctamente y no equivocarse, que solo permanezca en las palabras y se las represente de la manera más simple que pueda... Lo pintan también en las paredes, cómo Cristo desciende, con una capa de coro y una bandera en la mano, se presenta ante el infierno y golpea y expulsa al diablo, asalta el infierno y saca a los suyos de allí.

Como también en la noche de Pascua se ha hecho una obra para los niños. Y me gusta mucho que lo pinten así para los sencillos, lo representen, canten o digan, y deben dejarlo así, para no preocuparse con pensamientos elevados y agudos: cómo podría haber sucedido, ya que no sucedió corporalmente, puesto que él permaneció tres días en la tumba.'... 'Porque tales pinturas muestran bien el poder y el beneficio de este artículo, por qué sucedió, se predica y se cree, cómo Cristo destruyó el poder del infierno y despojó al diablo de todo su poder. Si tengo eso, tengo la esencia y el entendimiento correcto de ello y no debo preguntar más ni cavilar cómo sucedió o si fue posible, así como también está prohibido cavilar en otros artículos y no se puede lograr nada.'... 'Sin duda, los antiguos padres así lo entendieron, lo predicaron y lo cantaron; como aún suenan los antiguos himnos y cantamos en el día de Pascua: "El que rompió el infierno y ató al detestable diablo allí", etc. Porque cuando un niño o un sencillo escucha esto, no piensa en nada más que en que Cristo ha vencido al diablo y le ha quitado todo su poder.

Eso es correcto y pensado cristianamente, se ha captado la verdad y el significado correcto de este artículo, aunque no se hable de ello con precisión ni se exprese exactamente cómo sucedió. Pero, ¿qué importa eso si no perjudica mi fe y me da un entendimiento claro y brillante, el que debo y puedo tener de ello? Y aunque busque agudamente durante mucho tiempo, no puedo decir más de ello, sino más bien perder el entendimiento correcto si no me mantengo firmemente anclado en la palabra.'... 'Digo esto porque veo que el mundo ahora quiere ser sabio, en nombre del diablo, y dominar los artículos de la fe con su cabeza y desentrañar todo.

Así, aquí, cuando escuchan que Cristo descendió al infierno, corren rápidamente a especular cómo sucedió, y hacen muchas preguntas largas e inútiles: si solo el alma descendió, o si la divinidad estuvo con ella; también, qué hizo allí, y cómo trató con los demonios; y muchas cosas similares, de las cuales no pueden saber nada.

Pero debemos dejar de lado tales preguntas innecesarias y simplemente fijar y atar nuestro corazón y mente a las palabras de la fe, que dice: Creo en el Señor Cristo, el Hijo de Dios, muerto, sepultado y descendido al infierno, es decir, en toda la persona, Dios y hombre con cuerpo y alma, indivisibles, nacido de la Virgen, sufrido, muerto y sepultado; así que aquí tampoco lo divido, sino que creo y digo que ese mismo Cristo, Dios y hombre en una persona, descendió al infierno, pero no permaneció allí, como dice el Salmo 16:10 de él: "No dejarás mi alma en el infierno, ni permitirás que tu Santo vea corrupción."

Pero alma aquí, según el lenguaje de la Escritura, no significa, como decimos, una entidad separada del cuerpo, sino la persona completa, como se llama a sí mismo el Santo de Dios.'... 'Pero cómo pudo haber sucedido que el hombre yace en la tumba y sin embargo desciende al infierno, debemos y tenemos que dejarlo no comprendido e incomprendido; porque ciertamente no sucedió corporalmente ni físicamente, aunque debemos pintarlo y pensarlo groseramente y corporalmente y hablar de ello en parábolas. Como si un héroe fuerte o un gigante viniera a un castillo fuerte con su ejército y pancarta y armas y lo destruyera y capturara y atara al enemigo allí, etc.

Por lo tanto, di simplemente así, si te preguntan sobre este artículo, cómo sucedió: No lo sé realmente, ni lo imaginaré ni lo explicaré; pero te lo puedo pintar groseramente y poner en una imagen, hablar claramente y distintamente de cosas ocultas: que él fue y tomó la bandera como un héroe victorioso y con ella abrió las puertas y perturbó a los demonios, de modo que uno cayó por la ventana y otro por el agujero.'... 'Esto se ha dicho de la manera más sencilla sobre este artículo, que uno se aferra a las palabras y se queda con este punto principal, que a través de Cristo el infierno ha sido destrozado y el reino y poder del diablo han sido completamente destruidos, por lo cual él murió, fue sepultado y descendió, para que ya no nos dañen ni nos dominen, como él mismo dice en Mateo 16:18.'"