Traducción de la versión en alemán

Artículo II. Sobre el pecado original

1] Además, se enseña entre nosotros que después de la caída de Adán, todos los seres humanos que nacen naturalmente son concebidos y nacidos en pecado, es decir, que desde el vientre materno están llenos de malos deseos e inclinaciones y no pueden tener verdadero temor de Dios ni fe verdadera en Dios por naturaleza;

2] que esta plaga innata y el pecado original son verdaderamente pecado y condenan a todos aquellos bajo la ira eterna de Dios, a menos que sean renacidos por medio del bautismo y el Espíritu Santo.

3] Además, se rechazan a los pelagianos y otros que no consideran el pecado original como pecado, porque intentan hacer piadosa la naturaleza humana con sus fuerzas naturales, en desprecio al sufrimiento y mérito de Cristo.

Traducción de la versión en latín

Artículo II. Del Pecado Original.

1] Además enseñan que después de la caída de Adán, todos los hombres, engendrados naturalmente, nacen con pecado, es decir, sin temor de Dios, sin confianza hacia Dios y con concupiscencia,

2] y que esta enfermedad o defecto original es verdaderamente pecado, condenando y trayendo aún la muerte eterna a aquellos que no renacen mediante el bautismo y el Espíritu Santo.

3] Condenan a los pelagianos y otros que niegan que el defecto original sea pecado y, para disminuir la gloria del mérito y los beneficios de Cristo, argumentan que el hombre puede ser justificado ante Dios por sus propias fuerzas racionales.